“Este taller tuvo muchísimo éxito, no pensamos que iba a ir tanta gente. Fue muy bien recibido por las mamás y por los bebés también. Me pareció importante que a la gente le interese; porque el masaje shantala aumenta el contacto y la relación entre mamá y bebé. No se trata de hablarle al bebé con palabras, sino hacer una conexión profunda con la mirada y con el sentido del tacto” comentó la Licenciada Villán.
Por otra parte, manifestó que hay una posibilidad de continuar con estas clases bajo el programa Crianza en Tribu, en un ambiente más cálido y personalizado. En esta oportunidad “La respuesta de la gente fue hermosa, les encantó y lo que pude observar es que muchos bebés lo recibieron bien, ya que era un ambiente grande y desconocido para ellos. Seguramente la mamá que lleve el masaje en su casa, va a encontrar mejores resultados que ese día. La clase fue a modo informativa y práctica para que las familias puedan realizar la técnica en sus hogares” acotó.
Éste arte milenario que comenzó en la India, se practica desde el nacimiento y consiste en masajear con un aceite vegetal tibio todo el cuerpo desnudo del bebé, apoyándolo sobre las piernas de la madre.
En realidad, la propia naturaleza inicia el masaje al niño/a mucho antes de su nacimiento: en el cuerpo de la madre, durante la gestación. Todos los bebés y todos los adultos deberían tener la oportunidad de experimentar los beneficios del amor y la seguridad que provienen de los primeros contactos.
El masaje Shantala es amor, cariño, ternura, felicidad, compasión, respeto, paz, tranquilidad, apoyo, comunicación. Es una forma más de decirles a nuestros hijos “TE QUIERO” sin usar las palabras, sólo nuestras manos, nuestra mirada, nuestro corazón.
Múltiples son los beneficios que acompañan al masaje Shantala; entre ellos, podemos destacar aquellos que hacen referencia al bebé:
Estimula el sistema nervioso.
Mejora el sistema respiratorio.
Ayuda a aliviar las molestias ocasionadas por los gases, cólicos y estreñimiento.
Mejora la digestión.
Los bebés aprenden a relajarse y a conciliar el sueño.
Fortalece el vínculo del apego entre la madre o el padre y el hijo.
Hidrata y tonifica la piel.
Fortalece el sistema muscular y psicomotor del bebé.
Para los padres o las personas que realizan el masaje:
Es placentero.
Ayuda a reducir las posibilidades de depresión post-parto.
Proporciona relajación.
Enseña a conocer las necesidades de su hijo.
Mejora el vínculo afectivo entre los padres y el bebé.
Incrementa la confianza.
El masaje Shantala es un arte sencillo e importante en sí, que se caracteriza principalmente por tres elementos: por las técnicas en sí, por la aplicación de ejercicios de yoga para el bebé y por el uso de la hidroterapia (al final, se baña al bebé para eliminar los restos de aceite, regular su temperatura y generar relajación). El masaje Shantala se basa en la presión suave y los movimientos descendentes, ya que su objetivo es la relajación del bebé. Por ello, el ritmo es lento, sin prisas.
A través del programa “Crianza en Tribu” se propone generar espacios de encuentro, reflexión, sensibilización e información a través del formato taller y grupo de reflexión, destinados especialmente a madres, padres, niños, niñas y personas interesadas en acompañar a la infancia en su proceso de crecimiento y desarrollo, respetando su propio ritmo y singularidad.
En el centro de Atención Infantil vas a encontrar gimnasia para embarazadas, talleres de preparación para la maternidad y la paternidad, taller de alimentación complementaria, vacunatorio, kinesiología respiratoria, fonoaudiología y pediatría.