Los accidentes domésticos como intoxicaciones, caídas, ahogamiento, heridas cortantes, electrocución, quemaduras, etc., son un motivo de consulta frecuente en las guardias hospitalarias y sonmuchas veces causa de mortalidad en la infancia.
Este taller está destinado a las familias, docentes y todo aquel que tenga niños a cargo o bajo su cuidado y estuvo a cargo de las Licenciadas Noelia Sanz y Natalia Stivanello del Programa Crianza en Tribu, que funciona en el Hospital Provincial Peliche.
La psicóloga Sanz explicó que en el taller se tratan los diferentes riesgos que existen en un hogar a distintas edades, según la etapa evolutiva en la que se encuentra el niño, como prevenir esos accidentes, que en realidad se llaman lesiones no intencionales porque se pueden prevenir a diferencia del accidente que es algo imprevisto que sucede al azar.
El objetivo es ir marcando según la etapa evolutiva del niño de qué manera prevenir lesiones como por ejemplo la ingesta de tóxicos, la introducción de objetos en la nariz o en las orejas, incluso en la boca, la electricidad. La cocina y el baño son los lugares donde más accidentes domésticos hay, en la cocina con el fuego, las hornallas, cuando se cocina con los niños en brazos, y en el baño con la ingesta de tóxicos, con lo niños que tragan agua, o quedan solos en la bañadera.
Por otro lado se trabajó la parte de los primeros auxilios psicológicos, que hacer si suceden algunas de estas cuestiones, como mantener la calma, informar al niño, intentar normalizar, explicar al niño que le van a hacer si es necesario recurrir a un hospital, que es necesario tener en el botiquín de la casa, y también se analizan casos clínicos, para que las familias resuelvan de qué manera se podrían haber evitado y cuáles serían los primeros auxilios ante esas situaciones de riesgo.
