Costantini confirmó que las dos muestras que se encontraban en proceso de investigación epidemiológica arrojaron resultados negativos para sarampión, llevando tranquilidad a la comunidad en general, pero sin desatender las medidas de prevención que principalmente se basan en la vacunación.
Cabe recordar que, el secretario de Estado de Salud y Seguridad del Paciente, Ariel Varela, había comunicado hace unos días que desde el Ministerio de Salud y Ambiente habían avanzado en un protocolo epidemiológico, que permitió el rápido accionar y control de los casos sospechosos correspondientes a personas de Río Gallegos, los cuales fueron aislados y monitoreados permanentemente a la espera de los resultados de las muestras.
En declaraciones a medios, Costantini manifestó que se han intensificado las acciones de vigilancia epidemiológica en todo el territorio provincial, a los fines de detectar de manera oportuna posibles casos sospechosos de esta enfermedad “altamente contagiosa, grave y potencialmente fatal”.
Por este motivo, es fundamental incentivar a la comunidad a reforzar la principal herramienta de prevención que es la vacuna Triple Viral (sarampión, rubéola, paperas), incluida en el Calendario Nacional de Vacunación. Se recomienda aplicarla a los 12 meses de vida y al ingreso escolar (5 años). Se sugiere reforzar la dosis especialmente al personal de Salud, viajeros, personas en contacto con niños y adultos inmunosuprimidos, y menores de un año que aún no pueden recibir la vacuna.
“Es de suma importancia que se controlen, verifiquen y completen los esquemas de vacunación, y ante la presencia de síntomas compatibles con sarampión, consulten de inmediato a un profesional en un centro de salud u hospital”, remarcó la ministra.
El sarampión se manifiesta con fiebre alta, secreción nasal, conjuntivitis, tos, manchas blancas en la boca (cara interna de la mejilla), y erupción cutánea característica. En casos graves, puede derivar en complicaciones como neumonía y encefalitis.