Por ello, la Secretaría de Pesca y Acuicultura de Santa Cruz recuerda la prohibición de la recolección de moluscos bivalvos, y solicitan a la comunidad no consumir moluscos y/o mariscos cuyo origen no garantice los controles bromatológicos correspondientes, debido a que la presencia de estas toxinas puede ocasionar afecciones gastrointestinales, trastornos neurológicos y hasta dificultades respiratorias.
¿Cómo prevenir intoxicaciones?
Los consejos para evitar riesgos en la salud son:
- No recolectar moluscos y/o mariscos en las playas para el consumo casero.
- Respetar las disposiciones, ordenanzas y avisos públicos de vedas a la extracción y consumo de moluscos.
- No adquirir preparaciones elaboradas con mariscos (conservas, ensaladas, paellas, etc.) en puestos callejeros o locales que no tengan habilitación bromatológica.
- No comprar mariscos frescos “al pie del barco”, en escolleras o los que puedan ofrecer recolectores no autorizados.
- No comprar moluscos que no cuenten con el correspondiente certificado sanitario emitido por un organismo oficial.
- Comprar o consumir mariscos solo en pescaderías, restaurantes o locales de comidas debidamente habilitados.
Es clave destacar que las toxinas no son inactivadas por la cocción, el agregado de vinagre o limón, o por el consumo de alcohol. Tampoco existen antídotos.