El dispositivo de seguridad se planificó en la Jefatura de Policía, desde la Superintendencia de Seguridad, con la participación de todas las áreas operativas de orden público como así también de tareas específicas en esta ciudad capital.
Por directiva del Ministro de Seguridad, trabajaron de forma integral las diversas unidades operativas, participando del dispositivo de seguridad la Dirección General de Policía Caminera, la Agencia Provincial de Seguridad Vial, la Dirección General de Operaciones Policiales, la Dirección General Regional Sur y sus dependientes, Comisarías locales con sus jefes y segundos jefes, y División Comando Radioeléctrico local. Cabe resaltar que también colaboró la División Tránsito Municipal.
Al respecto el Superintendente de Seguridad, Comisario Mayor Juan José Pérez, detalló que se trabajó sobre los puntos de circulación con mayor riesgo en cuanto a velocidad, donde se establecieron puntos de control y en cada uno de ellos había un equipo integrado por inspectores municipales, integrantes de Infantería, Comando Radioeléctrico y de la comisaría de jurisdicción.
“Este operativo implicó netamente la detención del tráfico vehicular, amén de pedir toda la documentación de rigor, lo que se pretendía era mantener un diálogo con el conductor y ver en qué estado de ingesta alcohólica estaba”, indicó.
En este sentido marcó que se efectuaron test de alcoholemia y se controló un número importante de vehículos. “Tuvo un buen efecto el operativo, la presencia policial implicó que el conductor que había ingerido bebidas alcohólicas no maneje y se tome un taxi”, expresó.