El ministro de Seguridad, Lisandro De la Torre, estuvo presente en la septuagésima novena y segunda promoción de la Carrera de Cadetes de la Policía de Santa Cruz.

Allí, transmitió el saludo de la Gobernadora a los presentes, y agradeció a todo el Consejo Provincial de Educación, ya que junto a las áreas de formación de la institución policial y el Ministerio de Seguridad, “se trabajó fuertemente para cumplir algo que se soñó y en lo cual se comenzó a trabajar hace mucho tiempo y que, en la gestión anterior con el entonces ministro de Gobierno, Fernando Basanta, anhelábamos tanto, que era tener las Tecnicaturas validadas de acuerdo a los estándares de nivel nacional para que nuestros efectivos puedan tener un salto cualitativo en su formación inicial pero sobre todo pensando en la carrera policial como una carrera progresiva, de profesionalización constante para tener una mejor calidad de seguridad pública”.

Valoró la formación durante estos tres años, etapa que culmina a partir de la jura, convirtiéndose en nuevos oficiales de la Policía Provincial. “Quiero desearles el mejor de los éxitos en su carrera y que a partir de este momento obren como buenas personas, buenos policías, y sobre todo con muchísima responsabilidad y vocación de servicio para seguir construyendo una institución policial cada vez más fuerte, más profesional y sobre todo para poder mirar a la cara a nuestros ciudadanos y ciudadanas de nuestra provincia”.

En esta línea, De La Torre expresó: “Decirles que tanto nuestra Gobernadora como todo el equipo que lo compone queremos cada vez un mejor servicio de seguridad, que fue el que soñamos cuando se sancionó la Ley de Seguridad Pública. Apuntalando una mejor calidad de servicio, con mucha firmeza y sobre todo con mucha templanza para hacer cumplir la ley y trabajar junto al Poder Judicial en cada uno de los hechos que nos toque intervenir”.

Por su parte, el jefe del Departamento Escuela de Cadetes, Comisario Inspector Darío Ernesto Mathias, felicitó a los flamantes egresados y manifestó: “Recuerden y tengan presente que primero somos hombres y mujeres de bien, pero a la vez funcionarios encargados de hacer cumplir la ley al servicio de nuestra comunidad”

Seguidamente marcó que el ejercicio de autoridad debe ser respetuosa plenamente de la ley y de la dignidad humana, entendiendo que “vestir el uniforme significa un gran honor y orgullo que conlleva consigo una gran responsabilidad”.

“Cada esfuerzo que hacemos es en pos de mejorar por nuestra sociedad y de este modo enaltecemos a nuestra gloriosa institución ya que cada acto que hacemos, por mínimo que sea, debemos realizarlo con la mayor de las responsabilidades, ya que la suma de pequeños actos nos permite alcanzar grandes logros”, finalizó.