De esta forma, el público riogalleguense disfrutó de una pieza teatral que los transportó al año 1953 para reflejar la vida de tres hermanas afectadas por el momento político-social, los valores humanos, los abusos paternos y la fantasía entremezclada en lo cotidiano.
En esta función, llevada a cabo en el Salón Auditorio del Complejo Cultural Santa Cruz bajo un estricto protocolo de bioseguridad, el público local fue al encuentro de una obra atravesada por la violencia de género y la lucha por la conquista de los derechos de las mujeres.