Desde la apertura del Centro de Medicina Nuclear alrededor de treinta pacientes pudieron constatar que la tecnología, el equipamiento y una multiplicidad de profesionales están dispuestos a darle batalla al cáncer y darles una mayor calidad de vida sin sufrir el desarraigo en la búsqueda de un tratamiento efectivo.
Uno de esos profesionales es el ingeniero Físico en Medicina, Edgard Núñez que asumió el desafió de radicarse en nuestra provincia para lograr que el Centro que “sea reconocido a escala internacional y trabajar fuerte para que se realicen los mejores tratamientos y que la ciencia salga imperando frente a este mal que es el cáncer”. Egresado de la Universidad Favaloro, eligió la Ingeniería en Física Medica, carrera que sólo se puede seguir en Argentina a nivel mundial. “Cuando el doctor (René) Favaloro vivía, junto con otros profesionales del Departamento de Física, coincidieron y tomaron la decisión de que era necesario vincular la Física con la medicina y de esta manera crearon la carrera”, explicó el especialista.
En cuanto a su trabajo en el Centro de la capital santacruceña, detalló que estará a cargo de los aceleradores lineales y también de Braquiterapia, una terapia de radiaciones que tiene la particularidad de poseer una fuente radioactiva en forma permanente. “Se debe estar cambiando cada cierto tiempo, es así que me ocuparé de la calidad y la debida atención a los pacientes dentro de ese esquema de terapias y por otro lado, coordinar y proteger al personal técnico que se encuentra en constante exposición a la radiación al operar los equipos”, indicó Núñez.
Más adelante destacó el alto nivel de tecnología existente en el flamante Centro de Medicina Nuclear y señaló: “Hay una multiplicidad de equipos de profesionales que nunca lo había visto, más aún tomando en cuenta el equipamiento que está planificado instalarse”.
En este sentido, el especialista enfatizó que es muy importante contar con radiofármacos que poseen en sí una vida muy corta después de ser fabricados y es por ello, que es esencial tener in situ un equipo que construya esos radiofármacos sean inyectados al paciente. Este procedimiento puede realizarse con el Ciclotrón que está próximo a instalarse en una de las salas del Centro Nuclear. “Es maravilloso porque todos los pacientes van a poder recibir el tratamiento adecuado sin tener que trasladarse a otros centros urbanos de alta complejidad, porque en Río Gallegos se contará con la tecnología y el equipo interdisciplinario preparado para tratar a los pacientes con cáncer”.
Esta es una de las razones por las cuales Nuñez decidió dejar Panamá, país donde se crió, para ejercer su profesión en Santa Cruz. “Al llegar me encontré con un edificio y un equipamiento que supero todas mis expectativas. A nivel equipamiento y tecnología contamos con un tomógrafo donde se puede realizar simulación virtual, próximamente se instalará un Ciclotrón que se utiliza para fabricar los radiofármacos, por lo cual es vital tener una vigilancia radiológica permanente a través de monitores que me garantizan que las dosis están muy por debajo de aquellos valores permitidos a escala mundial, en cuanto a radiación se refiere en el interior como también, en el exterior del complejo o Centro de Medicina Nuclear”
Finalmente el profesional aspiró a que con el tiempo el Centro de Medicina Nuclear que funciona en la capital santacruceña “sea reconocido a escala internacional y ese es uno de nuestros objetivos el trabajar fuerte para que se realicen los mejores tratamientos y que la ciencia, salga imperando frente a este mal que es el cáncer”.