En una entrevista que llevó adelante LU85 TV Canal 9, el presidente de la Caja de Servicios Sociales se refirió a distintos aspectos que fueron abordados el pasado martes 10 de septiembre, en la reunión a la que asistió con parte del directorio de la obra social, en la Honorable Cámara de Diputados. En la ocasión se hicieron presentes en la Comisión de Desarrollo Social, Salud, Derechos Humanos y Vivienda.

En este contexto, el titular de la obra social provincial comentó que en el encuentro le plantearon el tema del Vademécum: “Se explicó la implementación. Se habló también sobre la realidad de la Caja, de la situación, los cambios y los controles que estamos implementando para buscar la sustentabilidad de la caja en el tiempo”.

Con respecto a las decisiones nuevas sobre el Vademécum, Pérez Soruco dijo que “es una implementación de control, una herramienta más de control que tiene que tener la obra social; todas las obras sociales las tienen”.

“La única obra social que no la tenía era la Caja. El Vademécum es un listado de medicamento ambulatorio que cubre lo que está en ese listado. El afiliado mantiene su cobertura y se le cubre los medicamentos del listado. Los planes crónicos, las patologías especiales, enfermedades, HIV, diabéticos, niños con discapacidad o chicos con discapacidad, todos esos planes crónicos están cubiertos y no se le modificó la cobertura” explicó y agregó: “No se tocó nada, en absolutamente nada se le tocó a ellos (el beneficio). Lo que sí necesitamos es que todo eso esté empadronado. Nosotros venimos desde enero, más o menos, haciendo la campaña de empadronamiento de los enfermos crónicos”.

Además, puntualizó que el empadronamiento también es una herramienta de control, que permite saber la cantidad de afiliados que tiene el organismo, con ciertas patologías, cuáles son los pacientes crónicos, etc.

“Mucha gente se empadronó y muchos, sobre todo la gente mayor, no se empadronó porque no se le modificaba su cobertura. El empadronamiento es para tener control de la información y las patologías que se manifiestan en la gente que está empadronada. Es un listado de medicamentos ambulatorios: una angina, una infección urinaria, que se receta está en el Vademécum y se lo cubre. Obviamente, que no se toca la monodroga, se tocan algunas marcas, pero no la monodroga” manifestó.

Para ejemplificar, mencionó que en el caso de “un Amoxidal, una amoxilina, la monodroga es la misma, tiene muchas marcas; se modificaron algunas marcas, pero la monodroga es la misma, entonces, tenés la más cara y la más barata”.

Se establecieron marcas intermedias y la monodroga no se modifica. El listado es amplio, están todas las moléculas, estas no se modificaron moléculas señaló Pérez Soruco.

Receta electrónica

El presidente de la CSS especificó que de la mano del Vademécum “viene la receta electrónica; hoy estamos trabajando, tenemos casi un 50% de emisión de receta electrónica; y no hay receta electrónica si no tenés Vademécum”. “Esto es una política también de control, que se establece a nivel nacional; para fin de año ya es obligatoria la implementación de la receta electrónica” informó.

Asimismo, aclaró: “Obviamente, hay un montón de medicamentos que no están dentro del Vademécum, pero esto no lo determina la caja. Hay un organismo que es el ANMAT que determina que hay medicamentos que pasan a ser de receta, de venta libre y ya no van por receta y otros sí, se mantienen. Entonces bueno, eso no lo determina la caja, lo determina el organismo como la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), que te dice a partir de tal fecha, tal medicamento, dejarán de ser de venta bajo receta y pasan a ser de venta libre”.

La Caja de Servicios Sociales ya está aplicando la receta electrónica, “muchos profesionales ya la están usando; hoy tenemos casi un 50% de uso de receta electrónica, pero a fin de año ya es la obligatoria para todo, pero a nivel nacional ya está eso”.

Para los adultos mayores que no se empadronaron o su ficha requiere alguna modificación, el afiliado tiene que ir a la delegación o por internet descargar el formulario, luego se lo lleva a su médico de cabecera, quien completa la información; allí se indica si es un enfermo crónico, por ejemplo, de diabetes, y si consume tal cantidad de dosis, por tantos días, etc.

Por último, Sergio Pérez Soruco detalló que luego el formulario se lleva a la obra social, o se envía por mail a la auditoría médica o la auditoría farmacéutica, allí lo validan y lo suben al programa que corresponde, y el medicamento para el enfermo crónico está validado.

Fuente: Secretaría de Comunicación Pública y Medios / LU 85 TV Canal 9