La Prof. Nancy Mariana Perea trabaja con los alumnos desde un espacio de taller cuyo eje es la lectura, que permite a los estudiantes acceder a obras literarias de diversos autores y también ampliar sus tareas pedagógicas orientando su imaginación hacia fines solidarios.
El proyecto que presentaron, respondiendo a la convocatoria del Premio Presidencial, se denomina “Manos que leen” y comenzó el año pasado.
La EPJA Primaria N° 16 modalidad de Educación en Contextos de Encierro (ECE), perteneciente al Consejo de Educación del Gobierno de Santa Cruz, cuenta con una matrícula de alrededor de 20 alumnos, entre los 18 y los 40 años, que reciben el servicio educativo en la Alcaidía, y, en las Seccionales 4° y 5° de Caleta Olivia.
En referencia a las políticas socioeducativas que la institución lleva adelante, la Profesora explicó que desde el 2012 vienen trabajando en este tipo de propuestas.
Los estudiantes fabricaron más de 250 artículos -recreativos y de carácter didáctico- desde el inicio de “Manos que leen”. Los mismo fueron donados a establecimientos de Educación Especial: uno de Comodoro Rivadavia, otro de San Julián, y a las Escuelas N° 2 y N° 8 de Caleta Olivia.
El espíritu que impulsa a docentes y alumnos es siempre el de la solidaridad. “Siempre estamos buscando, tanto nuestros alumnos como nosotros, alguna alternativa para trabajar para la sociedad”, señaló la Profesora.
Los trabajos realizados incluyeron la producción de material didáctico en escritura braille y para estimulación temprana. En cuanto al primero, aplican la forma tradicional de escritura para lo cual utilizan punzón y pizarra. Los alumnos se formaron en esta técnica a través de una capacitación que se les brindó en el 2012.
Al momento de elegir los libros para la transcripción a escritura braille, consultan a docentes de Educación Especial y, de esta manera, han confeccionado gran cantidad de cuentos destinados al nivel de Educación Inicial. Se sumó también el trabajo de escritura de uno de los alumnos; se trata de un relato que puede utilizarse en el proceso de alfabetización. El estudiante se ocupó también de pasarlo a este sistema que permite a disminuidos visuales acceder a la educación y a la recreación a través de la literatura.
Otros materiales elaborados dentro de “Manos que leen”, están asociados a la estimulación temprana como por ejemplo almohadones en forma de emoticones que producen sonidos; para lo cual reciclaron telas e incluyeron pequeñas campanas y otros insumos que generan sonidos.
Por último, la Prof. Perea comentó que los alumnos de la institución participaron recientemente en la Feria Nacional de Educación, Arte, Ciencias y Tecnología -que tuvo lugar en Córdoba-, con el proyecto “El arte de reciclar” por el que obtuvieron una mención.
