Esta situación fue detectada por la empresa de seguridad que monitorea las alarmas de los edificios escolares. Alertados por la activación de una de ellas acudieron ayer al edificio de Beccar y Solis y constataron que la puerta de ingreso al gimnasio estaba parcialmente abierta.

Los directivos de ambas instituciones educativas recorrieron las instalaciones y detectaron gran cantidad de agua en el gimnasio producto de que las canillas de los sanitarios de ese sector estaban abiertas y también en el laboratorio del primer piso, lo que provocó filtraciones de agua hacia el entretecho de la Biblioteca, ubicada en planta baja, provocando la caída parcial de placas de durlock del cielorraso.

Los directivos labraron un acta en la que consta que el viernes las instalaciones habían quedado cerradas y que, en una recorrida por el edificio, las canillas de todos los sanitarios también estaban cerradas. Asimismo, indicaron que el laboratorio no había sido utilizado en lo que va del año escolar.

Cabe destacar que la Dirección de Mantenimiento Escolar del CPE trabajará en la reparación de los daños que, según estimaciones preliminares, ronda los 65 mil pesos sólo en el reemplazo de las placas de yeso. También es necesario constatar las condiciones de la instalación eléctrica.