En el marco de la Semana de la Educación Popular, organizada en distintas sedes situadas en establecimientos educativos de Río Gallegos, el tallerista Pérez Guarnieri abordó "el concepto de música afrocentrada, y el trabajo de esa música tanto en las aulas como en la música autóctona", comentó el Licenciado Daniel Carceglia quien brindó detalles de lo desarrollado el pasado viernes por la tarde, en el Conservatorio Provincial de Música "Rvdo. Padre Eugenio Rosso".
Sobre la trayectoria del tallerista, el Licenciado informó que “es un investigador muy avanzado en músicas que vienen del África, sobre su impacto en América Latina y su traslación a lo que era el Virreinato del Río de la Plata y hoy es Argentina”, por lo que estuvo trabajando “con dinámicas percusivas pero también corales que tienen que ver con músicas del Congo, músicas de Guatemala y con el candombe porteño; y el modo de trabajarlas en el aula y, sobre todo, el modo en el que impactan en las músicas actuales, en nuestras culturas”.
A la actividad asistieron docentes y estudiantes de música, educadoras y educadores musicales, “de distinto tipo, educadoras y educadores populares”, quienes conformaron un grupo que ejecutó sus tambores como si fueran “latidos, golpes que resonaban en todo el conservatorio pero que vibraban dentro de nuestro pecho y emotivamente inclusive". Todo esto con la dirección del profesor Pérez Guarnieri que inició el taller sentándose en ronda con los alumnos, “frente a un tacho de pintura, comenzó a tocar y luego les fue indicando qué ritmos, qué golpes, qué frecuencias y qué secuencias debían llevarse adelante y con eso fue armando un proceso de casi 15 minutos en el que ni siquiera se habló; pero se logró llevar adelante de modo coherente, de modo grupal, de modo consciente, una serie de ritmos muy vitales, muy viscerales al mismo tiempo, y muy unísonamente logrados"; después de ese tiempo de percusión se presentó: "Buenas tardes, yo soy Augusto”.
Esa tarea inicial se desplegó con indicaciones físicas del Profesor, "con los ojos, con las manos, con las baquetas, con los pies y con desplazamiento de su cuerpo, claro; con todo el cuerpo, porque es todo el cuerpo el que hace música siempre", puntualizó Carceglia.
Ese mismo viernes 29 de marzo, a partir de las 17:00, Sebastián Rey dictó el segundo taller de la tarde, en el mismo ámbito. Él musicoterapeuta trabajó "en torno a la tecnología en el aula, cómo poder empezar a implementar algunas cuestiones tecnológicas de modo que sea interesante", para que "los participantes puedan apropiarse de los conocimientos y no ser consumidores de las tecnologías, que en general es el posicionamiento más frecuente".
Su idea fue la de invitar a "problematizar un poco entorno a qué es la tecnología para nosotros, de qué modo la usamos, qué formas creativas de utilizarla hay y cómo poder salir de ese lugar pasivo de consumidores, y pasar a un lugar activo de productores de nuestras propias tecnologías". En esta línea de pensamiento, propuso la construcción de "unos micrófonos de contacto, que son muy económicos; se llaman piezoeléctricos, son muy fáciles de armar y eso nos va a permitir hacer audible lo inaudible", expresó al tiempo que detalló que estos dispositivos permiten, por ejemplo, "escuchar cómo suena la ropa, cómo suenan los objetos; y a partir de eso hacer algunas dinámicas de juego y de toque".
Se trata de elementos cuyas partes se pueden adquirir en casas de electrónica, en general; y son de uso accesible. Están compuestos por una especie de "pastillita, como si fuera una moneda pequeña, el cable y una ficha pequeña; con eso se puede enchufar a la computadora o a una consola, un amplificador, y ya estamos listos para salir" con el audio. Cualquier persona puede elaborar este micrófono y conectarlo "a cualquier dispositivo que amplifique un poco la señal, incluso algunos celulares también tienen entrada". Luego agregó que este tipo de recurso permite grabar y muchas otras actividades derivadas de dicha tarea.
El Profesor Rey es de Buenos Aires, se desempeña como docente y musicoterapeuta; investiga y viaja para dictar talleres y charlas. Actualmente, entre los trabajos que desarrolla se dedica a brindar cuidados paliativos en una clínica, a través del abordaje con pacientes, sus familiares y cuidadores, "es un encuadre grupal y comunitario".